Orientación

No quiero escuchar más el despertador del celular!!! Si pudiera lo haria pedazos, pero es mi herramienta de trabajo, sino como me llamarian para las clases particulares. Mi tia, ya está chata de ser mi secretaria y de guardarme los recados cuando estoy en la Universidad, si asi es, apenas tengo para las fotocopias y más encima pagarle un sueldo a mi tia como secretaria, ya seria mucho!!! Aunque mi tia es de esas personas que nunca te cobraria un peso...
Bueno, me levanto, hago una oración...Tengo tanto que hacer este dia, y como siempre prometo que este será el dia en el que empezaré hacer las cosas mejor que antes, mejor que ayer...jajaja que mentira más macabra , aunque todos los dias pienso en lo mismo nunca sucede...
!Que insignificante soy! No puedo ayudar como quisiera, no puedo hacer las cosas tan bien como yo quisiera, no puedo decirla a esa persona lo que pienso como yo quisiera, no puedo decirle a esa persona lo que siento como yo quisiera...En fin soy muy poca cosa...
En fin me pongo en marcha desde mi casa a la U, me despido de mis familiares, mi tia me desea buena suerte y que regrese a la casa, que ande con cuidado, que no ande muy tarde sólo, mis primos me piden que llegue temparno para jugar fútbol (como me gustaria pero no alcanza el tiempo) y por último una vecina me ve , me saluda y me dice que Dios me bendiga, porque soy un chiquillo muy simpatico y bueno, yo le agradezco su gesto y sigo con paso raudo...
Ya en el metro voy pensando en todo lo que tengo que hacer en el dia, una ancianita sube, bueno la empujan para que suba , yo amablemente le hago un gesto y le digo que se coloque al lado mio, donde habia más espacio, por último yo hago malabares para que ella vaya más comoda, se acerca a mi con una sonrisa y me comienza a hablar...hablamos sobre la familia y lo que yo hacia, se emocionaba al contarme que su nieto era el primero al entrar a la universidad y que estaba estudiando periodismo...Estación San Joaquín me despido, y ella me dice que Dios me bendiga,que quedaban pocas personas como yo, yo le agradeci, pero segui mi camino pensando lo mismo que yo era poca cosa...
Entro a mi facultad saludando con una coordial sonrisa y apretón de manos a mis amigos...Mi amiga D se me acerca y me pide un consejo, yo amablemente hago lo que puedo, y le otorgo unas palabras de consuelo y aliento, me dice que está muy agradecida, me da un abrazo y se despide y me dice que soy una gran persona...
!Que paradoja! Yo sientiendome poca cosa, porque no puedo hacer las cosas como yo desearia, sin embargo, las personas que me rodean me consideran una gran persona!!!
Nunca más esperaré aceptare las cosas como son, Es cierto quizas yo piense que no valgo mucho, pero lo que hago a "medias" pienso yo, es mucho para los que me rodean...
Es por eso que puedo decir : «No vivo yo, es Cristo quien vive en mí. O si yo vivo todavía en la carne, yo vivo en la fe al Hijo de Dios, que me ha amado y se ha entregado por mí» (Gál 2,20).